Karimme Morales

Villa Alemana 1992

Socióloga, poeta y pintora. Ha hecho parte de las antologías poéticas Sumergible V (2016), Inframundo (2017), Desde el Interior (2017), Poemas descerrajando (2018), Poesía en Toma (2018).

Estoy cansada de las antologías poéticas de 1900
La exaltación del cuerpo femenino
Cómo el acto poético del sexo
Porque no soy ni pálida, ni doliente
Ni me forjo en tu honda como la piedra
Mi cuerpo no lo desnudaré
Ni con temor, ni con inocencia
No tiritaré entre los dedos
O en silencio
Mi libertad no la reservo a tus fuerzas
Menos a la promesa del amor romántico
Mi clítoris no es ni rosas, ni mariposas
Ni el mundo esperando tu movimiento
No soy muñeca esperando el ardor
No soy tu moldura
Menos el verso construido desde tu voz
Con la imagen silenciada de un receptáculo
Sobre el cual vagabas
No seré aquel recuerdo
Ni el eco en tu mente susurrante
Cantándote lo perdido
Nunca fui ornamento de tu miembro
No fui tuya ni seré algún día
El cuerpo de otro hombre
No me construyas en la poesía
Como la belleza esbelta
No descubriste mi sexo
Ni me ganaste como la brisa de un nobel
No soy las mujeres que cogiste
Entre las trementinas como musas mudas
Yo no quiero veinte poemas de amor

Arando la tierra con mis uñas
La mudez se ha conciliado en mis parpados nuevamente
Reposo, existo
El calor baja por mi garganta y anida en mi pecho
Se expande
Mi espalda es sólo un monumento vacío
Se incendia
Permanece erguida cómo el último tallo de la cosecha
Desde ahí dentro
Las imágenes corren consecutivas
El ruido me persigue
Contando mis pasos sigilosos de regreso a la tierra
Al barro que cubre mi cuerpo de niña
Al sol que cela mis ojos y los mantiene cerrados
Anuncio mis carencias y mis dedos danzan
Suben y bajan por mi vientre siguiendo patrones que no existen
Caen en mis caderas, revuelven mis caderas
Confabulo mi cuerpo con mi cuerpo persiguiendo la trascendencia
Espero
Espero que vengas y dibujes sobre mis costillas tu rostro
Espero quedarme recostada en el barro
Naufragando en el barro
En los pequeños islotes de piedra que brotan erectos y embravecidos
Se retiran las olas de mis brazos
Se retiran las olas de mis piernas
Y un jardín brota apelmazando mi carne
Cómo un piso fértil que yergue entre los pastizales.